Unas 25.000 personas fallecen cada año a causa de las más de 60 enfermedades relacionadas con la ingesta de bebidas alcohólicas, como cánceres, patologías hepáticas, diabetes tipo 2 ó depresiones.
Alrededor del 10 por ciento de las muertes que ocurren en España están relacionadas, directa o indirectamente, con el alcohol, porcentaje que se eleva hasta el 25 por ciento en los casos de defunciones de jóvenes de entre 20 y 30 años, según alertó ayer el presidente de Socidrogalcohol, Francisco Pascual, durante la presentación del dossier “Alcohol, una amistad peligrosa”, realizado junto con la Confederación de Alcohólicos, Adictos en rehabilitación y Familiares en España (Caarfe) y la farmaceútica Lundbeck.
En concreto, unas 25.000 personas mueren cada año en España por consumo de alcohol, de las cuales el 70 por ciento son hombres y el 30 por ciento mujeres. Y es que, tal y como avisó la responsable de Lundbeck, Susana Gómez-Lus, la ingesta abusiva de este tipo de bebidas se relaciona con la aparición de más de 60 tipos de enfermedades y lesiones como, por ejemplo, cáncer, patologías hepáticas, cardiovasculares, diabetes tipo 2 y trastornos mentales entre otros.
Se considera que una persona tiene un consumo de riesgo cuando, en el caso de los hombres, bebe entre cuatro y seis unidades al día o entre 28 y 46 a la semana y entre dos y cuatro unidades al día o entre 14 y 28 semanales en el caso de las mujeres. Sin embargo, y pese a que esta estimación, realizada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha sido comentada en diversas campañas de concienciación, tres de cada diez españoles consideran “admisibles” este número de ingestas.
Pero la realidad, según añadió el doctor Pascual, es que se ha demostrado que el 12 por ciento de todos los cánceres tienen una relación directa con la toma de espirituosos. Por ejemplo, el cáncer de mama aumenta su riesgo de aparición en un siete por ciento cuando se consumen más de 20 gramos diarios de alcohol y el de intestino hasta un 23 por ciento, en comparación con la población cuyo consumo es moderado o nulo.
Asimismo, la bebida está detrás del 17 por ciento de los accidentes de tráfico, hasta el 30 por ciento de las muertes en carretera , y multiplica por tres el riesgo de aparición de depresión. “El alcohol tarda cinco minutos en afectar al cerebro y ahí es cuando empiezan a aparecer alteraciones en la cognición, habla o memoria, llegando a su efecto máximo a los 30 o 45 minutos de haberlo consumido”, detalló el experto.
POCOS DIAGNOSTICOS. Ahora bien, se estima que solo dos de cada 10 casos de alcoholismo están diagnosticados debido al estigma social que rodea a estas personas, a que muchos no son conscientes de que padecen este problema y a las deficiencias sanitarias que actualmente existen en su abordaje.
En este punto, el doctor Pascual avisó de que, aunque existen pruebas diagnósticas para detectar un caso de alcoholismo, hay dificultades para derivar esos supuestos a los servicios especializados.
EN PRIMERA PERSONA
“La bebida me quitó todo”
El presidente de la Confederación de Alcohólicos, Ángel Jiménez, confiesa que el fue una víctima de la bebida desde la adolescencia. “El alcohol me quitó todo”. Empecé a beber a los 13 años, a los 25 tuve un consumo más continuado y a los 35 ya tenía una dependencia. Llegué al punto de no valorar a mi familia y de perder mi personalidad. Afortunadamente, pasados 15 años, me he rehabilitado aunque sepa que tengo esta enfermedad crónica y que en cualquier momento puedo tener una recaída”, comenta, para zanjar insistiendo en la necesidad de que entre “todos” se detecte a los pacientes, se les trate y se les ayude a volver a una vida normal.
Precisamente, el acceso a un tratamiento y el apoyo médico que recibió es lo que ayudó a Jiménez a rehabilitarse, aunque al principio le costase darse cuenta del problema. “Pensaba que controlaba hasta que me dió una pancreatitis. Quise salir del problema con el alcohol pero necesitaba ayuda y la encontré en Atención Primaria y en mi familia, algo que es importantísimo para poder superarlo”, narra.
FUENTE: Diario de Ávila